El rey de las aves
Educación Ambiental: El reyezuelo listado en la cultura popular.
El rey de las aves nos muestra una breve historia que podemos encontrar en el libro «Las aves ibéricas en la cultura popular».
La educación ambiental tiene una gran relación con la cultura popular y es lo que queremos mostrar en esta serie de entradas del blog de Explora Natura.
Como sabéis, uno de los integrantes de Explora Natura, Antonio Pestana, es el autor del libro “Las Aves Ibéricas en la Cultura Popular”, una fantástica recopilación de dichos, refranes, cuentos, leyendas y chascarrillos que fue publicada por la editorial Tundra y pronto se verá complementada con una segunda parte que el autor tiene muy avanzada.
Así que continuamos esta serie de reportajes sobre educación ambiental con el cuento popular de “El rey de las aves”, referido al reyezuelo listado (Regulus ignicapilla), una de las aves más diminutas de nuestra avifauna.
Aquí va la historia:
Se juntaron un día los pájaros para elegir su rey, y de común acuerdo resolvieron que el elegido sería el que subiese volando más alto. Todos los pájaros se esforzaron y subieron y subieron lo más alto posible hasta agotar sus fuerzas.
-¡Soy fuerte, noble, valeroso. Y mis formidables alas me permiten volar muy alto, por encima de las nubes!.- pensaba para sí cada pájaro.
El ruiseñor opinaba que debía ser él, el rey de los pájaros, pues poseía el más bonito y melodioso canto de todas las aves.
El búho que es muy sabio y de noche, en vez de dormir medita, decía:
- Si fuese rey velaría por mis súbditos. Y mis súbditos dormirían tranquilos. –
La grulla que lleva una espléndida corona en la cabeza y posee un vuelo potente, sabía que su porte majestuoso podría llevarle a ocupar el puesto de la realeza.
El águila, imponente, aquella que desafía al sol y se sabe poderosa, volaba alto y más alto, segura de ser la ganadora del gran desafío.
Sin embargo, no sabía el águila, que sobre ella se había subido el reyezuelo listado, un pequeño pájaro de corona en la cabeza, que por su aspecto, aunque muy pequeño, parece predestinado a brillar en el cargo real, con sus colores amarillos y su cabeza coronada.
Fueron cansándose todos los pájaros y el águila, creyéndose ya ganadora, al no ver a ningún otro pájaro ya en el aire, descendió.
Lo que nadie se esperaba es que al descender el águila, el reyezuelo quedó suspendido en el aire, lo más alto posible, y ganó este gran desafío, siendo proclamado rey de las aves.
¡De esta manera, con su audacia, el reyezuelo consiguió ser proclamado el rey de las aves y ocupó su puesto con una gran fiesta celebrada por todos los pájaros!
¡Esperamos que os haya gustado! Atentos al blog de educación ambiental de Explora Natura!
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