Artabán: el cuarto Rey Mago

En Explora Natura lo sabéis quienes participáis en nuestras actividades y viajes de fin de curso, somos contadores de historias, transmisores de sueños, guardianes de ilusiones y esta es sobre el  cuarto Rey Mago.

Ya sabes, historia que no es contada, historia que se pierde en el tiempo. Así que no te las guardes.

Hoy os queremos dedicar una historia poco conocida de los Reyes Magos.

¿Cuántos eran los Reyes Magos?

En un día tan especial como hoy, os queremos contar la historia de Artabán, el cuarto rey mago. Se trata de una hermosa historia navideña basada en el cuento del escritor norteamericano Henry Van Dike, que publicó en 1896 bajo el título ‘The other wise man’.

Melchor, Gaspar, Baltasar y Artabán, eran cuatro importantes magos de oriente. Eran tan importantes, que reinaban en sus respectivos países. Eran estudiosos de las estrellas. Pasaban mucho tiempo mirando el firmamento e identificando cada una de ellas. En sus largas noches de estudios, los cuatro magos descubrieron una estrella diferente al resto. Brillaba más que las demás y en su cola dejaba un rastro de luz que intrigaba y fascinaba a los magos. Tras varias noches de observación, llegaron a la conclusión de que esa estrella les marcaba un camino que terminaba en Belén, lugar en donde estaba a punto de nacer el niño Jesús.

Los cuatro magos decidieron atender sus impulsos, ya que tenían la sensación de que debían seguir el camino que les marcaba aquella estrella.

Se pusieron de inmediato manos a la obra y cada uno fue a reunir los preparativos para el viaje. Quedarían en Babilonia. Sabían que sería un viaje largo y duro, así que se abrigaron bien y cogieron sus camellos y regalos para el niño, pues sentían la corazonada de que iba a ser una persona muy importante. Decidieron sus regalos de esta manera: Melchor llevaría oro; Gaspar, incienso, y Baltasar, mirra. Artabán decidió llevar como regalo unas piedras preciosas: un diamante, un rubí y una perla.
Cada Rey Mago partía desde un punto distinto, así que su encuentro se realizaría en Babilonia para después, continuar juntos su viaje.

Pero de camino a Babilonia, Artabán se encontró con un pobre hombre al que habían asaltado unos bandidos. Conmovido, para ayudarle, le entregó el diamante que llevaba como regalo para el niño.

Cuando llegó al punto de encuentro, los otros magos, cansados de esperarle, ya habían partido hacia el siguiente punto, Judea. Él fue detrás, pero al llegar allí, tampoco estaban. En su lugar, se encontró con un panorama desolador: Herodes había mandado matar a todos los niños recién nacidos. Al ver a un soldado a punto de matar a un pequeño, le ofreció un rubí a cambio de que dejara vivir al niño. Pero otros soldados, al ver lo que hacía, le cogieron prisionero y le encarcelaron en Jerusalén.

Después de 33 años entre rejas, el rey mago Artabán recuperó la libertad. Nunca se olvidó de su misión, así que, al enterarse de que Jesús iba a ser crucificado, decidió ir en su busca. Pero de camino, Artabán se encontró con una mujer que estaba a punto de ser vendida, y decidió entregar la perla que le quedaba a cambio de su libertad.

Cuando Artabán el cuarto rey Mago, cansado y con muy pocas fuerzas, llegó al monte Gólgota con Jesús, ya crucificado. Ambos se miraron y Artabán le dijo:

– Perdona, Jesús, porque llegué tarde.
Jesús entonces le dijo lo siguiente:
– Artabán, tú hoy estarás conmigo en el reino de los cielos, porque cuando tuve hambre, me diste de comer, y cuando estuve enfermo, me cuidaste. Cuando me cogieron preso, me liberaste…
– Pero Señor, ¿cuándo hice yo todo eso?- preguntó Artabán sorprendido.
– Lo que hiciste por tus hermanos, lo hiciste por mí- contestó Jesús.

Así que ya sabéis, nunca debemos olvidar nuestras tareas, ni dejarlas a medias; hay que acabar lo que se empieza. Además debemos compartir y tratar a los demás como queremos que nos traten a nosotros. Hacer el bien en nuestro camino, nos hace felices a nosotros y a los demás.

Por eso, y para recordárnoslo todos los años, Los Reyes Magos de Oriente, reparten regalos a los niños que se han portado bien, para celebrar la maravillosa aventura de su compañero Artabán, y la lección de vida que nos da.
¡Que seáis muy felices y hagáis felices a los demás en este año!
En Explora Natura es nuestro propósito.